Buscar este blog

Traducir

viernes, 20 de enero de 2017

Momentos Sublimes 6

A la entrada de un hospital, una trabajadora social me extendió un folleto sobre adicciones y me preguntó que si consumía drogas. Yo le contesté que mi única droga eras tú, que me encantaba emborracharme de tus besos, me relajaba fumar tu esencia natural de mujer primaveral, que me extasiaba perderme en las montañas y cuevas de tu geografía y que tu risa me inyectaba dosis inimaginables de alegría que recorrían por completo todo mi cuerpo y llenaban mi sistema. La trabajadora social empezó a repartir besos y condones a todas las personas que entraban y salían del Centro Médico…

Ayer fui al puesto de elotes de Don Pifas y le pedí uno con todo. El volteó a verme como si lo que acabara de decirle fuera una daga que se le clavara en el corazón y me dijo que así, con todo, era como él amaba a Doña Chayito antes de que lo abandonara para irse con Don Chuy, el señor de los helados. En ese momento corrí hasta la tienda de licores y regresé con una botella del mezcal más seco y fuerte que el dinero puede comprar, y mientras nos la tomábamos veíamos en silencio cómo el sol se ocultaba en el horizonte y el viento jugueteaba con las hojas verdes de los arboles…


Un reportero de la TV me entrevistó en la calle para conocer mi opinión sobre el alza en la gasolina y yo le dije que no me afectaba tanto porque el único combustible que necesitaba para echar andar este motor al que la ciencia llama corazón es tu amor, y porque eres tú la fuente de energía más poderosa de todos los universos paralelos en expansión que existen. El entrevistador bajó el micrófono y se puso a dar el pronóstico del clima mientras lentamente se quitaba la ropa…

...Fue hermoso!

lunes, 16 de enero de 2017

Momentos Sublimes Rutinarios

Mientras caminaba por un parque estornudé y la señora que le daba de comer a las palomas me dijo “bendito Dios”. Yo le repliqué que bendita era tu boca que da besos y no hiere con palabras ofensivas ni mentiras que lastiman, porque al abrirse crea un universo idílico que es capaz de transformar las tinieblas en luz y porque no hay nada más magnífico que escuchar mi nombre saliendo de ella. De repente las palomas emprendieron el vuelo y dibujaron en el cielo tu nombre antes de cagarnos a todos encima…

En un puesto de periódicos tomé un ejemplar de Men’s Health  y el vendedor me dijo que también tenía el número pasado por si me interesaba. Yo le contesté que no me interesaba tu pasado porque el destino había barajeado nuestras vidas y colocado en el lugar y momento adecuados y que por esa simple razón conocer tu historia era tan innecesario como saber que la clave de larga distancia de la Antártida es la 672. El vendedor empezó a llorar, sacó un teléfono, marcó un número y cuando al otro lado de la línea se escuchó una voz femenina le dijo que la perdonaba por haber sido tan puta…

El otro día me intentaron asaltar. Un ladrón con pistola en mano me dijo que le diera todo lo que tenía o disparaba. Yo le dije que lo único que tenía eran unas malditas ganas de volverte a ver por lo menos una vez más en la puta vida, porque desde que te fuiste me cuesta distinguir los días de las noches y todas las canciones de la radio –incluso los comerciales- me recordaban a ti. Dispara si quieres, le dije. El tipo bajó el arma, me miró con dolor y empatía, y sin más, nos abrazamos como si el mundo se fuera a acabar en ese instante…

En la madrugada me despertó una operadora de Telcel para preguntarme que si ya contaba con algún Plan y le dije que sí, que mi plan era conocerte, conquistarte, amarte y adorarte todos los días de mi vida y que sería paciente y dedicado porque nada que pueda durar para siempre es fácil de encontrar y conservar. La operadora dejó escapar un suspiro a través del auricular y con voz entrecortada me dijo que pronto nuestros caminos se cruzarían y seríamos felices. Agradecí sus buenos deseos y le dije que tenía que colgar porque quería seguir soñando con vos…


…FUE HERMOSO!!

lunes, 9 de enero de 2017

Momentos Sublimes en las Canciones

Hay canciones que duelen más que los golpes que te da la vida

El otro día, en un puesto de tacos, apareció un señor con guitarra en mano y se puso a cantar la de Amor eterno de Juan Gabriel. Yo hice como que no lo escuchaba mientras le ponía salsa a mis tacos, pero en mis adentros iba desmenuzando la letra y me dolían todas y cada una de las notas de la canción. Cuando la guitarra se detuvo y la voz se apagó, tuve que decir que el picante estaba muy fuerte para justificar mis lágrimas y como que a todos las personas del lugar les pasó lo mismo porque llorábamos ha rienda suelta…

De camino al aeropuerto, el conductor del Uber iba cantando un tango triste sobre una mala mujer y entonaba el estribillo con una voz tan desgarradora que terminé por entender su sufrimiento. Cuando llegamos a la terminal y me entregó la maleta, le di un abrazo de esos que pegan todas las partes rotas del corazón y le dije que el tiempo se encargaría de curar cualquier herida pero que no tratara de borrarla porque las cicatrices eran como insignias que todo guerrero con más de mil batallas en el amor debe tener. El conductor no dijo nada, solo me vio y empezó a llorar como si nunca lo hubiera hecho en su vida, y antes de abordar el avión descubrí que yo también odiaba a esa maldita mujer…

En el avión, la aeromoza me preguntó que si todo estaba en orden y le dije que sí, que pensaba dormir para soñarte porque soñar contigo era como estar despierto dos veces y que a pesar de que estaríamos lejos nuestro amor nos acercaba cada vez más y eliminaba  todas las barreras físicas y las distancias geográficas. Al oír esto, los demás pasajeros comenzaron a amarse en los pasillos y baños mientras el piloto cantaba por el altavoz Perfume de gardenias

En uno de los controles de seguridad me preguntaron que si "business or pleasure" y les dije que no way, que no way porque tu Amor no es negociable y lo único que me da placer es estar a tu lado y aspirar tu esencia de florecita primaveral sacada del jardín de Versalles. El oficial se quitó su gorra de Donald Trump, oprimió un botón rojo y mientras sacaba un guante blanco silbaba al borde del llanto la tonada de Love Hurts...

Fue hermoso!

martes, 3 de enero de 2017

Las claves para ser un Fuera de Serie

Recientemente he descubierto que diez mil es el número mágico que separa a la gente normal del resto, la diferencia entre un pianista aficionado y otro que es concertista de la Orquesta Filarmónica de Viena. Según Malcolm Gladwell, se requiere de esa cantidad de tiempo de PRÁCTICA para dominar con maestría una disciplina, y si lo que quieres es ganarte un buen lugar en la historia o transformar al mundo necesitas de otros dos factores adicionales: la OPORTUNIDAD y la HERENCIA.

Para los que confunden al amor con la rutina y a la pasión con la locura, seguramente no hallarán la diferencia entre la suerte y la oportunidad. Siempre he creído que todos tenemos al menos una chance en el trascurso de la vida para dar un vuelco al rumbo de nuestro barco, pero no todos logramos identificarla o quiénes lo hacen no la aprovechan del todo y ven en cámara lenta como se pasa de largo. Este tipo de oportunidades y las que ofrece la historia de vez en cuando a algunos individuos que están en el lugar y momento adecuado, son las que se deben de aprovechar sin dudar. Gladwell nos dice que para ser un multimillonario industrial como Rockefeller o Carnegie necesitabas haber nacido en la década de 1830 y de esa forma acudir puntual y bien preparado a la cita con la mayor transformación económica que se daría entre 1860 y 1870; o bien, para ser un riquillo del software tuviste que haber llegado a Silicon Valley en 1975 con veinte o veinticinco años, no tan “maduro” como para buscar un empleo estable en una empresa ya consolidada, pero tampoco tan joven como para adolecer de la experiencia necesaria y tener que interrumpir la revolución informática para asistir a la clase de Programación II. La oportunidad a la que se refiere no sólo puede estar basada en momentos clave o años, sino en los meses de nacimiento. Aquellos niños que nacen más cerca del inicio del periodo de corte de la escuela o cualquier deporte o disciplina, tienen una ventaja sobre el resto porque en aquella etapa tan primaria de la vida, los meses de diferencia son decisivos para su desarrollo físico y mental. Dicho con otras palabras, quién nace en el día uno del mes primero de ese periodo, va once meses y treinta días adelante de los que nacieron el último día permitido en la convocatoria: un mundo de diferencia a esa escala que se irá acentuando conforme el “Sistema” los ponga a competir y separe a los más “aptos”, “capaces” e “inteligentes” de los “rezagados”, “lentos” o “sin vocación”.

El tercer factor es la HERENCIA, pero no la que nos deja un pariente rico como en las películas o la que tiene que ver con la calvicie del padre o la nariz de la madre, sino del tipo de herencia cultural y formativa que nos es inculcada por nuestros padres. Puedes tener la práctica y aprovechar la “gran oportunidad” de tu vida pero si no tienes las herramientas para abrirte paso en el mundo no llegarás muy lejos. La inteligencia práctica –que es como se le conoce- está conformada por las habilidades sociales, capacidades de negociación y comportamiento de cada individuo y están fuertemente ligadas al tipo de educación que recibiste. ¿Te da pena preguntar algo? ¿Crees que mereces respeto y tu opinión es valiosa? ¿Puedes manipular las situaciones a tus deseos? ¿Cuál es tu reacción ante situaciones límite? ¿Qué dicta tu cultura sobre tus creencias y costumbres? Si la inteligencia analítica está asociada con el coeficiente intelectual de cada persona, la inteligencia práctica se construye en casa y en la sociedad a la que perteneces y va desarrollándose conforme se van enfrentando situaciones cotidianas, y es mediante estos aprendizajes, consejos y medidas implementadas por mamá o papá que se moldea el carácter que definirá nuestra forma de actuar en los siguientes años.

Resumiéndolo un poco, necesitas tener práctica (unas diez mil horas), aprovechar las oportunidades históricas (algunas irrepetibles) y haber desarrollado una poderosa inteligencia práctica que te lleve a conseguir lo que quieres para convertirte en un “fuera de serie”.

Cuando supe todo esto, tres preguntas repiquetearon en mi cabeza: ¿En qué puedo tener diez mil horas de práctica? ¿Estoy ante una oportunidad histórica? ¿La herencia de mis padres fue suficiente? Las respuestas me llegaron casi en automático pero me resistí a aceptarlas. Sin darme por vencido, escarbé profundo hasta que hallé la cuadratura del círculo y descubrí emocionado que debía de tener –a mi edad- más de sesenta mil horas en dormir. La cuestión es que en la época en la que vivo, el sueño no es un producto o servicio que pueda ser comercializado, y nadie –al menos que yo conozca- tiene tanta inteligencia práctica como para levantar un imperio multimillonario multinacional por el simple hecho de pasar horas y horas durmiendo. Tal vez la historia me ha jugado una mala pasada situándome en un punto en donde la habilidad en la que soy experto no es muy rentable. Tampoco es que me preocupe mucho esto, pero por si acaso, seguiré depurando mi técnica en el bello arte del buen dormir y trabajando mi inteligencia práctica hasta que llegue la “gran oportunidad”.

Bonus: En el libro Outliers (Fueras de Serie) de Malcolm Gladwell, se explica por qué Mozart, Bill Joy, Bill Gates, Robert Oppenheimer, The Beatles y Joe Flom son unos fueras de serie y desmorona algunos mitos sobre los genios, el talento innato y el éxito. También aclara el poderío económico de las generaciones judías y de porqué los orientales son más aptos para las matemáticas y dedicados al trabajo.